sábado, 29 de diciembre de 2012

DIÁLOGO ENTRE LA ENFERMEDAD Y LA SALUD




Enfermedad: Se me considera como una avería del cuerpo la cual hay que reparar rápidamente para que el enfermo pueda continuar haciendo su vida habitual
Salud: Es cierto, nadie te ve como una reacción inteligente del cuerpo y de la mente que puede conducir a que el enfermo recupere el estado de equilibrio del que se había apartado.
Enfermedad: Me da mucha rabia que me confundan con los “síntomas”. Es como si vamos al cine y confundiéramos a la pantalla de proyección con el proyector. A cada síntoma físico, le ha precedido un pensamiento, un sentimiento, una creencia negativa, algo que nos ha hecho sentirnos mal.
Salud: Es algo que repito todos los días, no es posible cambiar el contenido de una película actuando sobre la pantalla. Tendríamos que recurrir a la cinta y al proyector. Recurrir a las ideas negativas, a los pensamientos sombríos, a la dejadez, al abandono. Todo eso, convenientemente trabajado, modifica el estado de la pantalla de proyección que es nuestro cuerpo.
Enfermedad: El primer paso hacia la curación consiste en estar dispuestos a aceptar el síntoma, por muy inoportuno que parezca. A escucharlo, reconocerlo y descubrir, ayudado por el lenguaje del cuerpo, la verdadera causa que lo ha originado.
Salud: Cuando el enfermo habla de sus síntomas corporales, siempre nos está informando sobre un problema psíquico. Por ejemplo:
-“No lo veo claro”
-“Estoy hasta las narices”
-“Voy de cabeza”
-“No pude frenar a tiempo”
-“No lo puedo tragar”
-“Cuando lo veo se me revuelve el estómago”
Enfermedad: El síntoma es la manifestación física de algo que rechazamos en el interior. Casi siempre nos obliga a modificar una conducta para corregir nuestro desequilibrio y eso es bueno para la evolución. Nos obliga a actuar…

Por Alejandro Jodorowsky

viernes, 16 de noviembre de 2012

PROYECTO - SENTIDO





Hay personas que vienen a este mundo para obedecer a su madre, otros lo hacen para complacer al padre y otros, sencillamente, para vivir la vida.
En cierto modo, los proyectos de nuestros padres nos determinan. Pero esa determinación puede ser una oportunidad, porque lo que nos transmiten son sus soluciones ganadoras, de supervivencia. Para esa mujer, en el momento de la concepción, sólo importa una cosa: el contacto. Le transmite a su hijo ese valor, la importancia del contacto y de la relación, como un tesoro y no como una tara.
Ahora bien, el proyecto- sentido de los padres puede ser un valor, una solución de supervivencia, también puede limitar. El hijo es la solución de los problemas, de los conflictos, de los deseos de los padres. Siempre heredamos algo: un recuerdo, una historia, secretos de familia, etc. Los hay buenos y menos buenos, menos adaptados. Hay un proyecto – sentido que está ahí. Se puede vivir de manera positiva o negativa.
Marc Fréchet (Psicooncólogo y Psicólogo Clínico Francés) tiene como objetivo permitir que la persona, mediante la toma de conciencia, se libere.
Marc Fréchet descubrió esta noción de proyecto/sentido gracias a su propia historia. Marc Fréchet dijo que había empezado su vida con 18 años de cárcel. Su historia es la siguiente: el fue concebido al final de la 2ª Guerra Mundial, 1945. Su madre, que había hecho cosas no muy claras durante la guerra, tenía que ser juzgada y encarcelada. Así que los padres de Marc Fleché tienen la idea siguiente: si ella está embarazada el jurado quizá sea más indulgente y que las condiciones en la prisión sean mejores.
Marc Fréchet es concebido con la idea de, o bien evitar la cárcel a su madre, o que la estancia allí sea más confortable. Paso los 9 meses de su vida fetal en prisión, su madre lo tuvo en la cárcel y, cuando salió tenía 9 meses.
Este clima de concepción y los nueve primeros meses de vida, han condicionado su vida entera. El explicaba que su madre había hecho un niño porque lo necesitaba, para que fuera más confortable para ella, pero le daba lo mismo. Decía que, durante los primeros nueve meses de vida, estaba rodeado de mujeres que se ocupaban de él, menos su madre. En su vida siempre ha estado rodeado, pero solo.
Así que Marc Fréchet es concebido con el proyecto de liberar a su madre del encierro. Marc Fréchet en terapia tenía una especialidad con la que conseguía el 100% de éxito, de curación con las mujeres que padecían esclerosis en placas. El tenia prácticamente solo mujeres en su consulta y con las pacientes de esclerosis múltiple tenía un 100% de éxito.
Los proyectos son 99% inconscientes y se transmiten de generación en generación de manera inconsciente, por lo tanto no hay culpables, sólo leyes biológicas que son expresadas.
Cuando hemos tomado conciencia de ese Proyecto – Sentido, somos libres de conservarlo o de eliminarlo

sábado, 3 de noviembre de 2012

CADA ÓRGANO DAÑADO RESPONDE A UN SENTIMIENTO




El cuerpo es nuestra herramienta de curación?
Yo era enfermero en un hospital de Normandía y observe que pacientes con la misma enfermedad, tratamiento y doctor evolucionaban de manera muy diferente.

Bueno, cada uno es cada cual...
Exacto, mi hipótesis es que las enfermedades son una metáfora de las necesidades físicas y emocionales de nuestro cuerpo. Cuando no hay una solución exterior a esa necesidad, hay una solución interior.

¿Eso es para usted la enfermedad?
Sí, una solución de adaptación. Cada órgano del cuerpo quiere satisfacer su propia función, es decir, atrapar oxígeno, alimentos... Si el cuerpo quiere comer, pero en el exterior hay guerra y no lo consigue en un plazo razonable, se produce un shock.

¿Nace el conflicto?
Sí, el inconsciente inventa una vía suplementaria de supervivencia: un síntoma, que es una solución o una tentativa de solución inconsciente e involuntaria a ese shock vivido. En ese caso, el miedo a morir de inanición atacaría el hígado.

Póngame otro ejemplo.
Una persona que siempre tiene prisa puede desarrollar un nódulo en el tiroides, que envía más tiroxina y aumenta el metabolismo del cuerpo, eso la hará más rápida.

Pero tener prisa es psicológico.
Todo lo que captamos a través de los cinco sentidos, de los captadores neurovegetativos que vienen del interior del cuerpo, lo que pensamos o imaginamos, se traduce en realidad biológica.

¿Y provoca un síntoma?
Si no hay una solución concreta y consciente, sí. De manera que si escuchamos algo muy desagradable que nos afecta podemos tener acidez de estómago. Y hay algo muy importante que tener en cuenta.

Dígame.
El cerebro no distingue entre lo real o lo imaginario. Un trozo de limón en la boca o la idea de un trozo de limón en la boca provocan la misma salivación. En función del sentimiento particular, el shock afecta a una zona precisa del cerebro, visible por el escáner, a un órgano y a una realidad energética.

¿Realidad energética?
Somos una unidad compuesta de cuatro realidades inseparables: orgánica, cerebral, psíquica y energética. No hay ni una sola célula del cuerpo que escape al control del cerebro, y este no escapa al control del pensamiento, consciente o inconsciente; de manera que ni una célula del cuerpo escapa al psiquismo. Un shock siempre va acompañado de un sentimiento personal que repercute en los cuatro niveles biológicos.

¿Y es irreversible?
Cuando encontramos la solución esos cuatro niveles sanan simultáneamente. Una paciente tenía dolor en el hombro. "¿Desde cuándo?", le pregunté. "La primera vez estabas sola con mis hijos" "Si estas con tus hijos, no estás sola, ¿quién falta?" "Mi marido que nunca está, yo necesito estar arropada". Cuando lo reconoció, el dolor desapareció.

A lo largo de un día no satisfacemos todas nuestras necesidades fundamentales.
Cuando no las satisfacemos, nace una emoción. Si esa emoción se libera en el exterior bajo una forma artística, a través de la palabra, el baile o los sueños... todo va bien. Cuando el acontecimiento no está expresado, queda impreso y el cuerpo será el último teatro de ese evento.

¿Todo conflicto provoca enfermedad?
No, es necesario que sea dramático, imprevisto, vivido en soledad y sin solución. Cuando se dan estos cuatro criterios, el trauma se manifestará a través de la biología.

¿Distintas emociones corresponden a distintos órganos del cuerpo?
Sí, todo lo que tiene que ver con la epidermis responde a conflictos de separación; el esqueleto, a una desvalorización; la vejiga corresponde a conflictos de territorio. Para las mujeres diestras, problemas en el seno y hombro izquierdos corresponden a problemas con los hijos y viceversa para las zurdas; los desajustes en el seno y hombro derechos corresponden para las diestras a problemas con la pareja y viceversa.

¿Estómago e intestino?
No tener lo que se quiere y no poder digerir lo que se tiene corresponde al duodeno y estómago. El colon corresponde a un conflicto asqueroso, podrido. En el recto están los problemas de identidad: "No me respetan y me dejan de lado". Los riñones es la pérdida de puntos de referencia. Los huesos: grave conflicto de desvalorización...

¿Lo adecuado para estar sano?
Revalorizar las emociones, ser consciente de las emociones y expresarlas, es decir: bailar más a menudo. La gente está mucho tiempo en lo emocional pero son emociones procuradas: fútbol, cine... Un malestar compartido disminuye a la mitad, continúa compartiéndolo y acabará desapareciendo. Una felicidad compartida se multiplica por dos.

La ira y la violencia se expresan a sus anchas.
Un hombre tiene miedo, el miedo produce rabia, y la descarga enfadándose con su mujer. Cuando estamos en contacto con la emoción auténtica, se transforma; cuando lo estamos con la emoción de superficie, no hay cambio. Si el hombre se dice: "Lo que tengo es miedo", su miedo disminuye a la mitad. Hay que tomar conciencia de uno mismo.


*Entrevista a Christian Fléche (es enfermero y psicoterapeuta, Master en PNL, se especializó en metáforas y descodificación psicobiológica)


miércoles, 24 de octubre de 2012

LA CONCIENCIA: EL ESCAPE DEL DOLOR




…  “ La mayor parte del sufrimiento humano es innecesario. Es creado por uno mismo mientras la mente no observada maneje nuestra vida.
El dolor que usted crea ahora es siempre una forma de no aceptación, una forma de resistencia inconsciente a lo que es. En el nivel del pensamiento, la resistencia es una forma de juicio. En el nivel emocional, es una forma de negatividad. La intensidad del sufrimiento depende del grado de resistencia al momento presente, y esta a su vez depende de la fuerza de su identificación con la mente. La mente siempre busca negar el Ahora y escapar de él. En otras palabras, cuando más identificado esté usted con su mente, más sufre. O puede ponerlo en estos términos: cuanto más capaz sea de honrar y aceptar el Ahora, más libre estará del dolor, del sufrimiento y de la mente egótica….
… La mente, para asegurarse el control, busca continuamente cubrir el momento presente con el pasado y el futuro, y así la vitalidad y el potencial infinitamente creativo del Ser, que es inseparable del Ahora, queda cubierto por el tiempo, la verdadera naturaleza queda oscurecida por la mente. Se ha acumulado una carga cada vez más pesada de tiempo en la mente humana. Todos los individuos sufren bajo este peso, pero también siguen aumentándolo a cada momento, siempre que ignoran o niegan el precioso momento o lo reducen a un medio para obtener un momento futuro, que sólo existe en la mente, no en la realidad. La acumulación de tiempo en la mente humana individual y colectiva también carga una gran cantidad de dolor residual del pasado.
Si no quiere crear más dolor para usted y para los demás, si no quiere aumentar más el residuo de sufrimiento pasado que aún vive en usted, no cree más tiempo, o al menos no más del necesario para manejar los aspectos prácticos de su vida. ¿Cómo detener la producción del tiempo? Dése cuenta profundamente de que el momento presente es todo lo que tiene. Haga del Ahora el foco primario de su vida. Mientras que antes usted habitaba en el tiempo y hacía breves visitas al Ahora, establezca su residencia en el Ahora y haga breves visitas al pasado y al futuro cuando se requieran para manejar los asuntos prácticos de la vida. Diga siempre “sí” al momento presente. ¿Qué podría ser más fútil, más demente, que crear resistencia interior a algo que ya es? ¿Qué podría ser más demente que oponerse a la vida misma, que es ahora y siempre ahora? Ríndase a lo que es. Diga “sí” a la vida, y observe cómo esta empieza súbitamente a funcionar a favor suyo y no contra usted….

Eckhart Tolle – El Poder del Ahora. 

martes, 16 de octubre de 2012

CAMBIA DE PALABRAS.....





Cambia de palabras, cambia de creencias… cambiará tu vida



Cambiamos…
* Nunca por muy pocas veces.
* Siempre por a menudo.
* Ladrón por alguien que se apoderó de algo ajeno.
* Infinito por extensión desconocida.
* Eterno por fin impensable.
* Eres mi maestro por me enseñaste a aprender de mí mismo.
* Dame por permíteme que yo tome.
* Mi mujer por el ser con el que comparto mi vida.
* Mi obra por lo que he recibido.
* Así eres por así te percibo.
* Lo mío por lo que ahora tengo.
* Morir por cambiar de forma.
Definimos…
* Felicidad como estar cada día menos angustiado.
* Decisión como estar cada día menos confuso.
* Valentía como ser cada día menos cobarde
* Inteligente como ser cada vez menos tonto
Sustituimos…
* Comienzo por continuación de.
* Hermoso día por hoy me siento bien.
* Fracasar por cambiar de actividad.
* Yo sé por yo creo
Alejandro Jodorowsky en “Psicomagia”

jueves, 4 de octubre de 2012

EL EFECTO CURATIVO DE LA RISA



“Al reírnos nos desprendemos de lo que nos duele o tortura. La risa crea una distancia con nuestros propios conflictos y libera los nudos. Es como el estornudo, rápido y liberador”.(Alejandro Jodorowsky)
A nivel psicológico produce un efecto de distanciamiento del problema, de relativización de la toxicidad del entorno. Reírse de uno mismo y del sentimiento trágico de la vida supone aliviar cargas superfluas, entre otras razones porque no podemos escoger el tiempo que nos ha tocado vivir, y podría decirse que lo único que podemos escoger es la actitud con que nos tomamos las cosas. Recordemos que se necesita mucha más inteligencia e ingenio para hacer reír que para hacer llorar.
Fisiológicamente la risa, la broma provoca expansión en el aparato respiratorio, activación de sistema circulatorio y linfático y una mejor regulación del feed-back de las endocrinas. Es lo que se entiende por el efecto curativo de sentirse bien. ¿Les parece útil sentirse bien?
Juan Trigo 

martes, 18 de septiembre de 2012

EL HOMBRE PUEDE TRANSFORMAR SU PASADO




El hombre es milagroso en cuanto que puede transformar su pasado.
Algunos dicen “no se ocupen del pasado que el pasado ya no existe”, pero el pasado está vivo, presente, doloroso, en cada una de nuestras células, frecuentemente, produciendo enfermedades. El problema del pasado es simplemente que haya pasado, que lo dejemos atrás como una estatua congelada. Pero al pasado hay que hacerlo presente vivo para transformar su historia, para leerlo en otro código, para interpretarlo en el código del amor; y cuando interpretamos el pasado en el código del amor, nuestras heridas de la infancia se sanan. Y ahí nosotros somos los psicólogos, los psiquiatras, podemos sanar nuestra vida; todos estamos llenos de dolores, y a veces de dolores absurdos, que cargamos en la vida sin ni siquiera reconocer que existen.

La técnica respiratoria es muy importante, sobre todo la fase de pausa respiratoria, ¿por que razón? Porque cuando tú respiras lentamente y haces una pausa en la inspiración, la energía del inconsciente y el subconsciente sale a flote, es decir se pregunta ¿qué pasa aquí que no están respirando ?. En ese momento el inconsciente hace aflorar a la consciencia una parte a la que no habíamos tenido acceso, de la que éramos víctimas pero que no habíamos reconocido nunca en la vida, y en ese momento podemos dialogar con el subconsciente y podemos sacar nuestras heridas más profundas. Cuando hacemos eso podemos ir más lejos; así es como actuamos para la autosanación.

Yo puedo decirme, por ejemplo, ¿de dónde viene esta alergia?, si tengo una alergia y quiero librarme de ella. La alergia es algo que rechazo, un virus, una bacteria, un hongo, el frío, el calor, pero eso no es del todo cierto, eso es quedarnos muy cortos. No hay personas que sean alérgicas solo al frío, las personas alérgicas al frío también tienen miedo a la soledad, tienen miedo al frío del alma, al frío en los sentimientos, a la frialdad del papá o de la mamá, al desafecto, es decir, el frío es simplemente un símbolo. Cuando yo soy alérgico a algo, hay algo que rechazo o que temo.
Entonces si quiero cambiar mi alergia, reconozco mi alergia. Si se que no reconozco mi alergia porque me hace sentir vergüenza, entonces trabajo con la vergüenza: ¿qué cosas en la vida me evocan vergüenza ? Luego experimento el sentimiento de la vergüenza y veo cómo experimento la vergüenza, a veces me pongo pálido y frío, otras veces me pongo rojo como un tomate, otra lo experimento como un vacío o como un hueco a nivel del plexo solar, la puedo experimentar de muchas maneras. Dónde y cómo experimento la alergia, me da una idea de la parte de mi energía que esta comprometida.

Vamos a ver otro sentimiento, el miedo, yo diría que la mitad de nuestros lumbagos son por miedo.
El miedo provoca más lumbago que todas las hernias discales, todos los problemas articulares, todos los problemas de columna, porque el temor hace que metamos, literalmente, el rabo entre las patas, cerramos el esfínter anal interno, a ese nivel, hay un centro de energía muy importante y, nos cerramos a la vida, contraemos toda la musculatura lumbosacra, esa parte queda mal irrigada y nos dan unos lumbagos terribles, y ese lumbago es el nombre clínico del miedo.
Si logro reconocer el núcleo del miedo, si logro observar mi cuerpo y veo que tengo los glúteos y toda esta parte contraída, si logro respirar hacia esa zona y liberar el sentimiento del miedo, y llamar al miedo y decirle “ tú eres la mejor parte de mí mismo, cuando asciendes y te revelas, eres mi prudencia, ya no eres miedo, sino que eres prudencia, eres parte de mi amor también ”. Cuando yo, a través de la respiración, logro ascender esa energía del miedo, y logro trasmutarla al altar del corazón, que es donde realmente nace el hombre que puede sanarse y puede sanar la vida, entonces desaparece el lumbago.
Mi resentimiento, mi odio, frecuentemente, está anclado en mis articulaciones. Yo estoy así totalmente rígido. A veces, con el puño apretado en la noche, inconscientemente, dispuesto a pegar y a agredir. Pues bien, ese dolor articular, es resentimiento congelado en esa parte del cuerpo.
Si logro experimentar ese dolor y asociarlo a mi sentimiento de ira y a mi resentimiento, y logro comprender que mi resentimiento es algo que se construye en el plexo solar, que bloquea la energía aquí y no permite a la energía acceder a mi corazón, ni a mi sistema inmune, puedo hacer mucho más que el reumatólogo, o puedo ayudarle mucho, para curar y sanar mi artritis, y yo soy responsable, no tengo que esperar que el reumatólogo me resuelva el problema.
La enfermedad es mi problema, no es el problema del médico, es mi responsabilidad, yo también tengo que ver con eso. La medicina no puede ser el arte de pasarle la pelota al médico, porque le pagamos.
La nueva medicina de la conciencia, es el arte de responsabilizarnos de nuestra vida, y de descubrir que realmente podemos hacer mucho por nuestra vida.
Frecuentemente, vemos que una persona con un cáncer ha tenido un shock, o una pérdida afectiva muy grande. Si una pérdida afectiva le produce un vacío existencial de tal dimensión que se vuelve un vacío de energía, y permite que las células degeneradas puedan invadirle, es porque estaba apegado, ese es el problema del apego que yo debo reconocer.
Si alguien se va y yo lo vivo desde el amor, desde el desapego, sé que su consciencia esta conmigo, lo dejo partir, no lo amarro. Muchas veces, vemos a alguien al que se le muere el papá o la mamá pero no lo deja partir, eso es literalmente cierto, se queda con parte de su energía anclada al plexo solar. Esa anclada energética puede crear crisis de pánico, de hipertensión, cosas violentas en la clínica. Si nosotros logramos que la persona se sane, es su alma la que lo sana.
El sanador no lo hace por el paciente; yo como sanador soy un imán que le doy la carga que su alma necesita, realmente, la sanación es rescatar la autonomía, la autogestión, y la libertad del otro, para sanarse.
La verdadera sanación es darte las herramientas para que tú, desde tu conciencia, te sanes, no desde tu conciencia racional, sino desde tu sentimiento, desde tu amor, desde tu afecto.
Frecuentemente cuando uno está haciendo una sanación, ve que la persona, aunque no le haya dicho ni una palabra, empieza a llorar y a sacar su resentimiento, y luego siente una sensación de paz, que no es mi paz, es su paz, es la paz de Cristo que también habita en la persona que está siendo sanada. La paz esta ahí, ha estado siempre ahí, es parte de nuestra esencia, se trata simplemente de quitar todos aquellos apegos, aversiones, sentimientos, separatismos, toda aquella capa de ignorancia, para que la paz se revele tal cual es, y cuando la paz se revela, germina el amor, y cuando germina el amor la sanación es posible, aunque lo que tenga sea un cáncer, o un lupus.
Pero no te culpes si no lo logras, porque tú participas también en los problemas genéticos de la herencia, de la humanidad como grupo. Esto no es para creerse superman, uno puede ser muy orgulloso y decirse  “ estoy triste porque no me curé el cáncer ”, eso no es un fracaso, el cáncer es un maestro, a veces aprendemos la lección en una ocasión, otras veces necesitamos diez oportunidades, y otras necesitamos cien vidas tal vez, pero lo importante es aprender la lección.
Uno no aprende medicina de un día para otro, hay lecciones supremamente complicadas y difíciles.
También nos diplomamos o nos especializamos en el alma, cuanto más grande sea el desafío, más grande es la oportunidad de crecimiento. Yo sólo les he puesto un ejemplo de cómo podemos retomar nuestras emociones, identificar nuestras emociones, aceptarlas, no seguir huyendo de ellas, y así poder transmutarlas.
Pero una vez que sentimos la emoción, hay una pregunta fundamental: ¿cuál es la lección que hay debajo de esta emoción negativa? ¿Cuál era el mensaje, que me quería decir esta actitud y esta enfermedad? Cuando yo no digo NO, en la vida, termino resentido y con ira, pero la ira no es el problema, la ira me está diciendo que hay que aprender a reafirmarme diciendo NO.
La ira es la mejor estrategia de autoafirmación. Cuando yo manifiesto la ira y la transmuto, esa ira se vuelve sanadora, es lo mejor de mi fuerza, mi ira barre y limpia la casa y hace las cosas mas rápidamente, ustedes han visto a un ama de casa que en su ira revolotea y el almuerzo está hecho a las diez de la mañana.
Yo sabía cuando mi mamá estaba iracunda, porque a las diez de la mañana mi casa estaba como un espejo. Es así, la ira es una forma de energía que se puede transmutar físicamente, pero el hecho de que la transmutemos físicamente no resuelve la fuente de la ira; la fuente de la ira es la necesidad de autoafirmarse, y la necesidad de autoafirmarse es la necesidad de renunciar a la falsa complacencia.
Crecer espiritualmente no es decirle que sí a todo el mundo. El crecimiento espiritual no tiene nada que ver con la bobada, perdónenme la expresión, pero ser espiritual no es ser bobo, y ser tolerante no es ser bobo, la tolerancia no excluye la autoafirmación.
La autoafirmación es condición del crecimiento espiritual. Así que yo tengo que descubrir la lección, debajo del evento negativo, porque el evento negativo no es sino la apariencia, la sombra. Pero esa sombra cuando la quito abre una puerta de luz, una lección que yo puedo aprender en mi vida.
JORGE CARVAJAL POSADA
Médico colombiano creador de la Sintergética

jueves, 13 de septiembre de 2012

LOS ÁRBOLES GENEALÓGICOS VIVEN EN CADA UNO DE NOSOTROS




“El daño se transmite de generación en generación: el embrujado se convierte en embrujador, proyectando sobre sus hijos lo que fue proyectado sobre él, a no ser que una toma de consciencia logre romper el círculo vicioso. No hay que temer hundirse profundamente en uno mismo para enfrentar la parte del ser mal constituido, el horror de la no realización, haciendo saltar el obstaculo genealógico que se levanta ante nosotros como una barrera y que se opone al flujo y reflujo de la vida.
En esta barrera encontramos los amargos sedimientos psicológicos de nuestro padre y de nuestra madre, de nuestros abuelos y bisabuelos. Tenemos que aprender a desidentificarnos del árbol y comprender que no está en el pasado: por el contrario, vive, presente en el interior de cada uno de nosotros. Cada vez que tenemos un problema que nos parece individual, toda la familia está concernida. En el momento en que nos hacemos conscientes, de una manera o de otra la familia comienza a evolucionar. No sólo los vivos, también los muertos. El pasado no es inamovible. Cambia según nuestro punto de vista.
Ancestros a quienes consideramos odiosamente culpables, al mutar nuestra mentalidad, los comprendemos en forma diferente. Después de perdonarlos debemos honrarlos, es decir, conocerlos, analizarlos, disolverlos, rehacerlos, agradecerles, amarlos, para finalmente ver el “buda” en cada uno de ellos. Todo aquello que espiritualmente hemos realizado podría haberlo hecho cada uno de nuestros parientes. La responsabilidad es inmensa. Cualquier caída arrastra a toda la familia, incluyendo a los niños que están por venir, durante tres o cuatro generaciones.”
Alejandro Jodorowsky en “La danza de la realidad”

jueves, 6 de septiembre de 2012

CREER ES CREAR: Un Cuento sobre la Importancia de las Creencias




Érase una vez un hombre que vivía muy cerca de un importante cruce de caminos. Todos los días a primera hora de la mañana llegaba hasta allí donde instalaba un puesto en el cual vendía bocadillos que él mismo horneaba.
Era sordo, por lo tanto no escuchaba la radio, no veía muy bien. Ni un solo día leía diarios, ni veía televisión pero eso si… vendía exquisitos bocadillos.
Meses después alquiló un terreno, levantó un gran letrero de colores y personalmente seguía pregonando su mercancía, gritando a todo pulmón: ¡Compre deliciosos bocadillos calientes! Y la gente compraba cada día más y más.
Aumentó la compra, alquiló un terreno más grande y mejor ubicado y sus ventas se incrementaron día a día. Su fama aumentaba y su trabajo era tanto que decidió llamar a su hijo, un importante empresario de una gran ciudad, para que lo ayudara a llevar el negocio.
Al llamado del padre su hijo respondió: ¿Pero papá, no escuchas la radio, ni lees los periódicos, ni ves televisión? Este país está atravesando una gran crisis, la situación es muy mala, no podría ser peor.
El padre pensó: ¡Mi hijo trabaja en una gran ciudad lee los periódicos y escucha la radio, tiene contactos importantes… debe saber de lo que habla!
Así que revisó sus costos, compró menos pan y disminuyó la compra de cada uno de los ingredientes, dejando de promocionar su producto.
Su fama y sus ventas comenzaron a caer semana a semana.
Tiempo después desmontó el letrero y devolvió el terreno. Aquella mañana llamó a su hijo y le dijo:
-¡Tenías mucha razón, verdaderamente estamos atravesando una gran crisis!

jueves, 30 de agosto de 2012

OÍDOS SORDOS




Sordera selectiva: un oído funcional y fisiológicamente sano puede no oír lo que le conviene o no entiende. O como dice Friedrich Nietzsche, “Un hombre no tiene oídos para lo que no le ha dado acceso la experiencia”
Hay personas que a pesar de no padecer sordera escuchan “zumbidos…
Los “zumbidos” pueden simbolizar un negarse a escuchar la propia voz interior. Confusión entre el intelecto y la intuición. Miedo a perder el equilibrio y el control de sí mismo.
Una visión positiva sobre la sordera
En el sentido positivo, representa la oportunidad de establecer por fin un diálogo interior una vez que falta el exterior. Por ejemplo, Bethoven y Smetana, crearon obras de arte musicales a pesar de su sordera, oyendo su voz interior.
Parece ser que los oídos son para escuchar tanto lo que nos gusta como lo que nos disgusta. Para aprender a obedecer a la propia voz interna y también a la externa. Lo que nos molesta no es lo que se dice, sino la percepción que tenemos de ese mensaje. Desde ese punto de vista hacemos “oídos sordos” para evitar tener que obedecer o para no escuchar los problemas de nuestros seres queridos


jueves, 23 de agosto de 2012

¿EN QUE CONSISTEN LOS CICLOS BIOLÓGICOS CELULARES MEMORIZADOS ?



Los ciclos biológicos celulares memorizados identificados nos permiten volver conscientes patrones que repetimos de manera cíclica y establecer la relación entre nuestras creencias y nuestras experiencias vividas.
El estudio y análisis de los ciclos biológicos celulares memorizados, se basa en investigaciones de Marc Fréchet, (psicólogo clínico parisino) las cuales permiten volver conscientes patrones repetidos a lo largo del tiempo y manifestados en hechos y eventos de nuestra vida que, aparentemente, no tienen conexión.
Lo que ocurre en el presente tiene relación con lo ya vivido, permitiendo establecer una relación entre eventos, ciclos vitales y ritmos biológicos: se estudian eventos que han ocurrido en la vida del consultante, eventos totalmente objetivos y que ocurrieron en fechas concretas, se ordenan cronológicamente y se fragmentan; a partir de ellos se establece una relación asombrosamente lógica que desvela lo programado de manera inconsciente y basada en la memoria del cuerpo, sus células y su poder de programación.
Ante los conflictos no resueltos, eventos o impactos traumáticos (físicos o psíquicos) nuestro inconsciente responde almacenándolos como si de un programa informático se tratara y lo graba en el disco duro del ordenador. Se instala como una creencia destinada a repetirse en el tiempo y que se manifiesta a través de diferentes eventos en la vida que tienen el mismo denominador común aunque habitualmente no nos tomemos la molestia de relacionarlos. Es una defensa del sistema que tuvo sentido en un momento dado pero que en el presente resulta obsoleta.
Se trata de traer a la conciencia dichos ritmos y relacionar hechos aparentemente desconectados para generar la comprensión, ser consciente de la repetición de patrones y posteriormente des-programarnos a nosotros mismos. Un poco de auto-observación basta para reconocer que repetimos patrones, atraemos el mismo tipo de personas, situaciones, vivencias parecidas en cierta manera. Traer a la consciencia todo esto, hace que nos volvamos libres para no repetir dichos patrones inconscientes y poder des-programarnos.
La toma de conciencia de estos esquemas de repetición es la primera solución terapéutica y en la mayoría de casos, basta para detener el proceso.


EL DESAPEGO FAVORECE LA EVOLUCIÓN




¿Qué es la oportunidad? Es lo que está contenido en cada problema de la vida. Cada problema que se nos presenta en la vida es la semilla de una oportunidad para algún gran beneficio. Una vez que tengamos esta percepción, nos abriremos a toda una gama de posibilidades, lo cual mantendrá vivos el misterio, el asombro, la emoción y la aventura.
Podremos ver cada problema de la vida como la oportunidad de algún gran beneficio. Habiéndonos afianzado en la sabiduría de la incertidumbre, podremos permanecer alerta a las oportunidades. Y, cuando nuestro estado de preparación se encuentre con la oportunidad, la solución aparecerá espontáneamente.
Lo que resulta de esto es lo que denominamos comúnmente «buena suerte». La buena suerte no es otra cosa que la unión del estado de preparación con la oportunidad. Cuando los dos se mezclan con una vigilancia atenta del caos, surge una solución que trae beneficio y evolución para nosotros y para todos los que nos rodean. Ésta es la receta perfecta para el éxito, y se basa en la ley del desapego.

Deepak Chopra

lunes, 20 de agosto de 2012

NO LO PUEDO DIGERIR!!!!




Como dijimos en otras publicaciones la enfermedad es la respuesta apropiada del cerebro a un trauma emocional, y forma parte de un programa de supervivencia de la especie.
Una vez resuelto el trauma, el cerebro invierte el orden y el individuo pasa a la fase de reparación.
Veamos un ejemplo; el señor Mario X, de cincuenta años, ha dedicado toda su vida laboral a una pequeña empresa de muebles de oficina. Una mañana, al llegar al trabajo, el propietario le llama y le anuncia sin demasiados preámbulos su despido. El señor Mario X se queda sin respiración, incapaz de la menor reacción, sin poder explicarse la razón del mismo. Luego descubrirá que su puesto ha sido ocupado por el hijo del amo. Es una mala pasada que nunca se hubiera esperado y lo expresa diciendo: «¡No puedo digerir que me despidan así
Inmediatamente la mente informa al cerebro que transmite la orden a las células del estómago que dan comienzo a una proliferación celular, un tumor, para digerir el bocado indigesto que ha estado a punto de causar la muerte del señor Mario.

Estamos programados para sobrevivir y preservar la especie. El cerebro no establece diferencia entre lo real (la pata de conejo que se ha quedado en el estómago del lobo) y el imaginario (el despido de Mario, vivido como un bocado que se le ha atragantado). La enfermedad es, pues, la solución perfecta del cerebro en términos biológicos de supervivencia.
Mario puede resolver el problema eliminando el trauma emocional, o, de forma más «práctica», buscándose sencillamente otro trabajo.
Si Mario no está en condiciones de eliminar el trauma ni de encontrar otro trabajo, el cerebro entrará en acción sobre el único campo que tiene a su disposición, es decir, el estómago, antes de que Mario consuma todas sus energías en el intento de... «digerir» el amargo bocado. Intervendrá con el único medio que puede resolver a toda prisa el problema: ¡un tumor! ¡El tumor en el estómago será entonces, paradójicamente, la solución biológica para salvar la vida del señor Mario B.!
Pero Mario habría podido vivir el trauma emocional de su despido de modo distinto (cada uno de nosotros tiene su historia, su educación, su pasado):
* «Estoy rabioso por la injusticia que he sufrido», patología de las vías biliares;
* «Esto no me lo trago», patología del esófago;
* «Es una mala pasada, no puedo dejarla pasar», patología del intestino delgado;
* «Me ha hecho una guarrada», patología del colon;
* «Tengo miedo de no tener ya mi propio espacio», patología de los bronquios;
* «Se me viene todo encima», patología renal.
* «No valgo ya para nada», patología ósea.

Cada vez que un individuo, en el curso de su existencia, se ve afectado por un trauma emocional que tiene las siguientes características:
- Es vivido de manera dramática,
- Nos toma desprevenidos, cuando menos se espera;
- La emoción se impone a la razón;
- Es vivido en soledad, rumiando continuamente el problema (aunque todos saben lo que nos ha sucedido, nadie sabe lo que hemos sentido);
- No se encuentra una solución satisfactoria.
Entonces, y sólo entonces, entra en acción el cerebro poniendo en marcha un programa biológico especial para la supervivencia del individuo.
La intensidad del trauma emocional no tardará en determinar la gravedad de la enfermedad, mientras que el tipo de emoción sentida al comprobarse el trauma determinará la localización de la patología en el cuerpo.
Sin conflicto no hay enfermedad: darse cuenta de ello es el primer paso hacia la curación.
Descubrir el sentido de las enfermedades es lo más apasionante y fructífero que pueda imaginarse...
De Giorgio Mambretti y Jean Séraphin