miércoles, 10 de septiembre de 2014

SANAR LA DIABETES = DULZURA DE LA VIDA


¿Quién es el encargado de regular el azúcar en sangre?
El páncreas regula la concentración de azúcar en la sangre a través de la insulina…

¿Y qué es la insulina?
La insulina es la encargada de trasladar los nutrientes esenciales a todas las células del cuerpo, en especial la glucosa. Si no hay suficiente insulina, el azúcar queda retenido en la sangre, con lo que alcanza niveles tan altos que puede ser peligroso.

Es lo que llamamos diabetes. Parece que hay de distintos tipos
Todas ellas tienen en común los problemas con la insulina que están conectados a la recepción y la entrega de amor. Las células fracasan o no se abren cuando llega el amor:
*Desengaños amorosos.
*Miedo al amor.
*Incapacidad de aceptar el amor del otro.
*Incapacidad para la entrega en el amor.
*Deseo inconfesado de satisfacción amorosa.
*No haber aprendido a dar amor.
*No tener confianza para entrar en el reino del amor.

¿Por qué generalmente al diabético se le agria el carácter?
Como dice R. Dahlke “el cuerpo nos enseña: el que no ama se agria; o, formulado más claramente: el que no sabe disfrutar se hace insoportable.”
No se puede recibir lo que no se da. El diabético está contrariado porque quiere amor (cosas dulces), pero tiene miedo a buscarlo de manera activa. Esas contradicciones amargan la vida: “¡A mí lo dulce no me conviene!”. Pero es lo que desea “¡Qué más quisiera, pero no puedo!”.

En mi familia no hay antecedentes, sin embargo no comprendo por qué he desarrollado diabetes.
El desencadenante puede ser en muchos casos un estrés desmedido que se padece. Por un fallecimiento, una separación, una catástrofe natural, un accidente o atentado…Un ejemplo: una madre acompaña a su pequeña hija al cine y sufre un accidente de coche donde su pequeña de 7 años muere. Producto de la tristeza, la angustia y la culpabilidad, una semana después la madre contrae una diabetes.

Tal vez por eso se dice que “el páncreas y el bazo son los absorbedores de los golpes graves de la vida”
El páncreas es un órgano inseparable del plano emocional, enfermando frecuentemente en episodios de:
*Estrés no aceptado
*Temor a la propia muerte o confrontación con la violencia física.
*Duelos o pérdidas no aceptados
*Insatisfacción general por la vida
*Abusos en la infancia

Siete consejos para prevenir y paliar la diabetes:
1.-Dar amor sin esperar nada a cambio
2.-Trabajar el desapego
2.-Superar la dependencia
3.-En lugar de sufrir por no tener lo que creemos que necesitamos, dirigirnos activamente hacia lo que deseamos.
4.-Hay que dejar sin miedo que el amor penetre hasta los niveles más internos (las células)
5.-Aceptar el placer que proviene del contacto con el otro
6.-Disfrutar de la dulzura de la vida

7.-Buscar de manera activa la satisfacción, en el plano físico, psíquico y espiritual


Fuente: Plano Sin Fin