… “ La mayor parte del sufrimiento humano es
innecesario. Es creado por uno mismo mientras la mente no observada maneje
nuestra vida.
El
dolor que usted crea ahora es siempre una forma de no aceptación, una forma de
resistencia inconsciente a lo que es. En el nivel del pensamiento, la
resistencia es una forma de juicio. En el nivel emocional, es una forma de
negatividad. La intensidad del sufrimiento depende del grado de resistencia al
momento presente, y esta a su vez depende de la fuerza de su identificación con
la mente. La mente siempre busca negar el Ahora y escapar de él. En otras
palabras, cuando más identificado esté usted con su mente, más sufre. O puede
ponerlo en estos términos: cuanto más capaz sea de honrar y aceptar el Ahora,
más libre estará del dolor, del sufrimiento y de la mente egótica….
… La
mente, para asegurarse el control, busca continuamente cubrir el momento
presente con el pasado y el futuro, y así la vitalidad y el potencial
infinitamente creativo del Ser, que es inseparable del Ahora, queda cubierto
por el tiempo, la verdadera naturaleza queda oscurecida por la mente. Se ha
acumulado una carga cada vez más pesada de tiempo en la mente humana. Todos los
individuos sufren bajo este peso, pero también siguen aumentándolo a cada
momento, siempre que ignoran o niegan el precioso momento o lo reducen a un
medio para obtener un momento futuro, que sólo existe en la mente, no en la
realidad. La acumulación de tiempo en la mente humana individual y colectiva
también carga una gran cantidad de dolor residual del pasado.
Si
no quiere crear más dolor para usted y para los demás, si no quiere aumentar
más el residuo de sufrimiento pasado que aún vive en usted, no cree más tiempo,
o al menos no más del necesario para manejar los aspectos prácticos de su vida.
¿Cómo detener la producción del tiempo? Dése cuenta profundamente de que el
momento presente es todo lo que tiene. Haga del Ahora el foco primario de su
vida. Mientras que antes usted habitaba en el tiempo y hacía breves visitas al
Ahora, establezca su residencia en el Ahora y haga breves visitas al pasado y
al futuro cuando se requieran para manejar los asuntos prácticos de la vida.
Diga siempre “sí” al momento presente. ¿Qué podría ser más fútil, más demente,
que crear resistencia interior a algo que ya es? ¿Qué podría ser más demente
que oponerse a la vida misma, que es ahora y siempre ahora? Ríndase a lo que
es. Diga “sí” a la vida, y observe cómo esta empieza súbitamente a funcionar a favor suyo y no contra usted….
Eckhart
Tolle – El Poder del Ahora.